Un notario es un profesional del derecho que actúa como testigo imparcial en la celebración de contratos, la redacción de documentos jurídicos, los procesos de firma y los protocolos legales. En pocas palabras, es una persona a la que podemos acudir para gestionar asuntos legales y patrimoniales.
En el caso de la compraventa de un inmueble, es el responsable de brindar legalidad a las etapas del proceso y de asesorar legalmente tanto al comprador como al vendedor. Es importante que conozcas estas funciones para que aproveches al máximo sus servicios. Estas son algunas de ellas:
- Redacción del contrato: ya que conoce todas las cláusulas que deben incluirse en un contrato, así como las cláusulas abusivas que deben evitarse, un notario puede ser de gran ayuda para cualquier persona que no tiene los conocimientos necesarios para redactar dicho acuerdo.
- Verificación de las escrituras: las escrituras son un documento indispensable para cualquier transacción inmobiliaria. Un notario es responsable de verificar que las escrituras presentadas en el proceso son auténticas, y que el propietario tiene el derecho de disponer del inmueble como quiera.
- Inscripción ante el Registro Público: esta acción comprueba la legalidad de una transacción inmobiliaria. Un notario conoce todos los requisitos necesarios para realizar este trámite a cabalidad. También puede calcular los impuestos a pagar para que el propietario no incurra en faltas fiscales.
- Apoyo para el otorgamiento de hipotecas: si te interesa solicitar una hipoteca, un notario puede ayudarte a revisar el contrato de apertura de cuenta, validar un avalúo y aclarar los términos legales de la deuda a pagar.
- Regularización territorial: debido a la falta de información y recursos, algunas personas no llevan a cabo todos los pasos necesarios para finalizar un proceso de compraventa. Si este es el caso, un notario puede apoyar a alguien que ya pagó su hipoteca pero carece de los documentos necesarios para comprobar su propiedad.
A diferencia de un abogado, un notario está obligado a mantener neutralidad entre las partes. Sin embargo, por costumbre, el comprador es quien elige al notario a la hora de celebrar la compraventa. Así que si piensas comprar un inmueble, selecciona al notario de tu preferencia.